Sinforiano
García Sanz Sinfo, como le gustaba que le llamaran sus más cercanos amigos, nació en el regazo de una humilde familia labriega del pueblo campiñero de Robledillo de Mohernando y para más señas el día 8 de junio de 1911, por lo tanto estamos ante el pórtico del centenario de su alumbramiento. Una fecha que yo, en calidad de Cronista Oficial de Robledillo, su pueblo, no seré quien deje pasar por alto. Sinforiano bien se lo ganó y así deberá ser correspondido como en vida el 26 de enero del 1991,cuando se le agasajó en medio del I Encuentro de Botargas celebrado, como no podía ser de otra manera, en su pueblo de Robledillo. Allí transcurrió su feliz infancia acudiendo a la escuela, jugando y trabajando en las tareas del campo, entre surcos, ganado y mies, como cualquier muchacho de su edad, según me contaría infinidad de veces mientras sostenía su pipa de tabaco en la mano y se la llevaba a la boca para satisfacer sus humeantes sabores y olores. Sinforiano García Sanz, en 1972 A los once años se fue, invitado para trabajar, a Madrid. Corrían los años veinte y tras la marcha de su pueblo comienza a trabajar como aprendiz‑cortador de telas en una afamada sastrería donde permanece ocho años. A los 19 años de edad el mozo robledillense, y pese a sus ya adquiridos conocimientos en el oficio, deja este gremio de la tela y coge el del papel. Es su primer contacto con el libro al trabajar como ayudante en el Centro de Estudios Históricos, lo que es hoy Consejo de Investigaciones Científicas. Al término del obligatorio servicio militar recupera su último trabajo, en él que permaneció 16 años, tiempo más que suficiente para entablar contactos en calidad de ayudante del etnólogo alcarreño Castillo de Lucas, así como historiadores de la talla de Américo Castro y Gabriel María Vergara. También trabajó como recopilador para el Museo del Pueblo Español, sin que por ello perdiera el contacto y la amistad de los grandes ilustradores de la antropología nacional e internacional. Entre sus amistades bien ganadas se encontraba el mismísimo Julio Caro Baroja, quien visitaría Robledillo y Montarrón de la mano de Sinforiano para la realización de la obra escrita y cinematográfica A caza de Botargas. 1968. Tradiciones históricas de España. Hacia 1949, tal y como Sínfo me comentara, decide independizarse para regentar su propia librería. Si bien compagina su trabajo de empresario librero con el de escribir todo aquello relacionado con las tradiciones de nuestra provincia, afición que ya comenzara en 1948 con sus primeras publicaciones de investigación sobre las botargas y enmascarados alcarreños, así como otras tradiciones en la prestigiosa Revista de Dialectología y Tradiciones Populares de España. Incluso viaja y participa en numerosos congresos y exposiciones que versan sobre las rancias tradiciones etnológicas, tanto de España como fuera del territorio. En estos foros Sinfo defendía la pureza de la etnológica alcarreña, fruto de sus profundos estudios sobre las botargas, enmascarados y otras fiestas en Guadalajara. Durante muchos años ha colaborado en los medios escritos de nuestra provincia y entre ellos el de Nueva Alcarria. En 1983, donó toda su gran biblioteca y fondos bibliográficos, a la Excmª Diputación Provincial de Guadalajara, entre los que se incluían numerosos libros antiguos, y cantidad inmensa de folletos y separatas, con lo cual se inició el gran fondo que hoy tiene la Biblioteca de Investigadores de Guadalajara. Bibliografía de Sinforiano García Sanz: "Botargas y
enmascarados alcarreños (Notas de Etnografía y Folklore)", Revista de
Dialectología y Tradiciones Populares, IX (Madrid, 1953), 3r cuaderno.
(Primera parte). "Sobre el
Cancionero de Guadalajara y su geografía popular", cuadernos de Etnología de
Guadalajara, nº 25 (1993), pp. 83-141. [Panel de Alcarreños Distinguidos - Página Principal]© Panel mantenido por A. Herrera Casado - Guadalajara |