Quijote en edición manuscrita

Ya en las manos el Quijote manuscrito, en Aache abrimos un «Año Cervantes» lleno de novedades e iniciativas. Algunas de ellas relacionadas con uno de nuestros objetivos favoritos: El Quijote. Aquí podemos anunciar que está acabada una de las más sensacionales ediciones del Quijote que nunca se han visto: un Quijote manuscrito, por cervantistas y artistas, en dos gruesos tomos encuadernados en simil piel, y con una tirada exclusiva de 300 ejemplares para otros tantos afortunados.

Entre las iniciativas que a nivel institucional y privado se están acometiendo en la Región de Castilla-La Mancha y en España de cara a conmemorar, en 2016, el cuarto centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, ahora podemos anunciar que entre Guadalajara y El Toboso se ha fraguando una alianza de gran envergadura, y que ha culminado en la edición, en dos gruesos e impresionantes tomos, de la universal novela de Miguel de Cervantes: el Quijote de nuevo, pero en una postura que nadie se la imagina.

Hace ya unos diez años que, la dinámica empresaria toledana Isabel Fernández Morales, regidora de La Casa de la Torre en El Toboso, se propuso conseguir un ejemplar único de esta obra. Pidió a muchos amigos, la mayoría de renombre y especialistas en la literatura española del Siglo de Oro, que le copiaran manualmente un capítulo del Quijote, sobre un papel especial que ella les proporcionó. Conseguir que 126 personas, de todo el mundo, se sentaran durante unos días a manuscribir un capítulo del Quijote, el que ella les había asignado. Y hacerlo con su mejor letra, y ponerle algún dibujo, algún adorno, algún detalle personal, indicando al final incluso de qué edición del Quijote había copiado, no era tarea fácil, pero se consiguió.

Si a ello añadimos que convenció a José Saramago, ya por entonces Premio Nobel de Literatura, que también escribiera y le diera manuscrito un Prólogo para la obra, empieza a parecernos una tarea encomiable. Y si vemos al final, que este Quijote salió no solo manuscrito, y copiado a mano, sino traducido a sesenta y siete idiomas y dialectos, la obra resultó fantástica, difícil de imaginar. Pero existe. Y ese ejemplar único lo conserva Isabel Fernández Morales, encuadernado en cuatro enormes tomos, a tamaño folio ampliado, sobre papel verjurado ahuesado de 130 gramos, en su Casa-Museo de La Torre en El Toboso.

Pero es ahora que en Aache asumimos el reto de reproducir ese Quijote tan especial en una imprenta capaz de hacer la maravilla de dárnoslo fresco y como si fuera el primero de la serie, con el color de las páginas, las tintas, los adornos, los dibujos y acuarelas… por supuesto con sus índices y relación de copistas, referencias de sus capacidades, y el asombro de ver que cada página es diferente, nueva, y vibrante. Se han impreso exclusivamente 300 ejemplares, en dos tomos, que se van a ofrecer no solo a quienes participaron en la idea, sino a los coleccionistas más señalados de quijotes en todo el mundo, y a las bibliotecas españolas, americanas y europeas que quieran poseer este libro ya es, –y conste que hablamos siempre desde una perspectiva privada–, único en el mundo.

Cualquiera de nuestros seguidores que esté interesado en ampliar información sobre este tema, puede dirigirse a Aache Ediciones, aacheediciones@gmail.com o a Casa de la Torre, info@casadelatorre.com o para solicitar más datos, precios y formas de encargo. O pasar directamente a esta página para adquirirlo.