Abarca, pero aprieta

Una revista de pueblos que nos da confianza

Más allá de la docena de temas y personajes que semana tras semana nos repite la prensa guadalajareña, hay una serie de pueblos en los que late la vida. Con fuerza, aunque en silencio. Son ellos, y aquí les dedico un fuerte aplauso, los que forman en la Federación de Asociaciones del Alto Tajo. Que están muy unidos, tienen las ideas claras, hacen cuantos actos pueden y editan una revista que es modélica. Y que se llama “Abarca

Juntos somos más fuertes– es el lema o subtítulo de “Abarca” y a lo largo de sus 86 páginas a todo color se van apareciendo artículos, contribuciones y reportajes que hacen oir el latido de esos lugares.

Solo por darles visibilidad, y animarlos a seguir en este camino, quiero mencionar aquí, por ejemplo, el gran reportaje fotográficos sobre aspectos de estos pueblos tras el paso de la borrasca Filomena en la primera quincena de Enero de 2020, y que cubrió de un manto, de más de un metro de alto, la superficie de la comarca.

Pero hay mucho más: la explicación al patronazgo de María Magdalena en Huertapelayo (por Juan José Estrada Martínez), el “Diccionario Armallonero” que  aporta Luis Miguel Fraga Ibáñez, que supone un trabajo titánico de recopilación; el relato de “La Loba Parda” (otra revisión al tema) en Peralveche, por Víctor García,  o la referencia pormenorizada de la intervención sobre el territorio antiguo de Villaescusa de Palositos, donde se va a instalar un megaparque fotovoltaico de 150 Mwp, que va a cambiar el paisaje, pero que va a suponer una inyección importante de tipo económico y social en toda esta comarca.

En El Recuenco es su Asociacion Cultural la que nos descubre los modos de hacer la Ruta de la Ermita de Nuestra Señora de la Bienvenida, un paisaje al borde de la provincia, mirando a Cuenca, pero que bien merece ser recorrido. Y al final esa crónica histórica de El Villar de Cobeta que Luisi y Charo Ortiz nos brindan con tanta solicitud y buen hacer.

Todo en esta Revista rezuma alegría, positivismo, avances y sociabilidad. Una comarca lejana, pero no quieta, sino que está bien inserta en el siglo XXI, con el bagaje de los siglos y los paisajes, de las cosrumbres y los anhelos bien catalogado y asumido.