En el centenario de Juan Ramón Bosqued y García

Nacido en Campillo de Dueñas, en 1846, vino a morir en Zaragoza, en 1920. En la ciudad donde regentó Oficina de Farmacia y donde fundó la que hoy ha llegado a ser multinacional Sociedad Anónima Farmacéutica Aragonesa (SAFA). A Bosqued debemos unas cuantas aplicaciones farmacéuticas, diversos estudios sobre la composición de la orina, y el arranque de otra industria poderosa como fue la Azucarera Ibérica. Farmacéutico de pueblo en sus inicios (Fombuena, Cucalón, Mainar y Aguarón, donde finalmente le nombraron Hijo Adoptivo. También formó en su momento en el Consejo de Administración de la institución de ahorro “Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja” hoy más conocida como Ibercaja, cumpliendo en ella buena parte de los objetivos de empuje y dinamización social que tuvo en sus comienzos.

Ingresó Bosqued en la Real Academia de Medicina de Zaragoza como académico numerario y fue recibido en 1897, versando su discurso sobre la Importancia de las sustancias albuminoideas, dedicando las últimas palabras a expresar su admiración ante los grandes procesos de la bioquímica.

Escribió una obrita, dedicada a los viticultores del campo de Cariñena, destinada a la prevención y tratamiento del Mildium, enfermedad producida por el hongo “Peronospora vitícola”. Habla de su origen, ciclo evolutivo e influencias climáticas sobre el mismo. Trata después de los medios preventivos y curativos: lechazas de cal y sales de cobre. Sobre este último advierte que tanto las hojas como el fruto de las vides tratadas son inocuos para el hombre y animales. Termina relatando el modo en que se han de hacer las mezclas cuprocálcicas y la época de tratamiento, citando una serie de ensayos que se habían verificado. En este sentido pronunció una conferencia en Cariñena el 8 de septiembre de 1891, sobre Conocimientos prácticos aplicados a la agricultura, con motivo de la Exposición Vitivinícola regional, que junto a sus discursos en la Academia de Medicina zaragozana constituyen su legado científico escrito.

De Bosqued, al cumplirse el siglo justo de su fallecimiento, dedicamos un recuerdo en nuestro libro “Diccionario histórico de Autoridades Científicas de la Provincia de Guadalajara”, en el que se reúne casi un centenar de fichas biográficas sobre los científicos de nuestra tierra.