Villa-Rojo está de cumpleaños
Este mes se cumplen los 150 años justos de la inauguración del Royal Albert Hall, de Londres, un santuario de la música, donde también han sonado las composiciones de nuestro paisano Jesús Villa-Rojo. Y este recuerdo centenarial surge a propósito del también 50 aniversario de la composición de la obra cumbre del músico alcarreño, “Formas y fases”, que estos días él mismo nos recordaba en estas páginas. El estreno, a lo grande, tuvo lugar un año más tarde, en febrero de 1972, en el Teatro Real de Madrid, constituyendo un éxito notable, pues no en vano, como dice de él González Mira, crítico musical, “Formas y fases” es “una obra muy importante en el contexto general del clarinete…. En primer lugar, porque el instrumento no funciona en soledad, y en todo caso porque la pieza consagraba a Villa-Rojo como uno de los más grandes compositores españoles del siglo XX.
A propósito de esos aniversarios, surge de la mano de editorial Berenice un libro que nos sorprende de todos, y que hemos leído con atención y placer. Se trata de la antología “Jesús Villa-Rojo a través de sus discos” y que firma el crítico musical Pedro Gonz´alez Mira. Es una “biografía musical” de nuestro paisano, resalizada con ánimo de totalidad, y a la vez de síntesis. Dice el autor en su inicio que “Jesús Villa-Rojo es compsitor, instrumentista, director, investigador, experimentador, teótrico, ensayista, pedagogo, animador, organizador, divulgador… un Hombre del Renacimiento que pasa muchas temporadas, ahora ya en los años de su madurez, en su casa de Brihuega.
El Grupo LIM (Laboratorio de Interpretación Musical) por él creado, es uno de los ejes de la música contemporánea en Europa. Y la cantidad de piezas para él creado, innumerable. González Mira en este libro trata (y lo consigue) de reunir en catálogo comentado los más de 150 discos que contienen la obra musical del alcarreño. A quien nadie que se mueva en el mundo de la música puede ignorar, destacando una de sus más inteligentes y aplaudidas iniciativas: la nueva notación musical, que ha conseguido ampliar el espectro de los sonidos, sus formas de alcanzar el oído humano, el siempre mítico objetivo de conseguir que la vibración del aire nos emocione y sorprenda.